La afectada, quien estuvo acompañada por la vice defensora vecinal Gladys Fischer, explicó que Héctor Gutiérrez, marido de la mujer, le alquiló el sitio que figura como locales 86 y 87 por G. 2.400.000, cuando el valor real no pasa G. 800.000, donde tenía una mercería y un comedor.
“Me alquiló desde el 6 de setiembre del 2014 hasta el 16 de setiembre de este año. Este señor nunca me dio recibo y cuando estaba por vencer el contrato me sacó”, explicó.
Resaltó que comunicó del caso al director del Abasto, Iván Arévalos, quien a pesar de la promesa de atender la situación, transcurrido el tiempo nada hizo por investigar y esclarecer el tema.
“Arévalos me dijo que yo puedo solicitar el usufructo, la titularidad, porque está prohibido el subalquiler, que el Abasto no es para vivir de renta. Pero al final no hizo nada”, sentenció.
Agregó que sus mercaderías y electrodomésticos fueron sacados por la administración y que hasta hoy desconoce el paradero de los mismos.
Por su parte, la vice defensora Fischer anunció que junto al concejal Carlos Galarza presentarán una minuta solicitando la presencia del director de este mercado para dar explicaciones de lo planteado.
RESPUESTA. Iván Arévalos, director del Abasto, dijo que mediante engaños, Vendeura prestó o alquiló ese comercio de la auténtica dueña y que después ya quiso quedarse definitivamente con el mismo.
“Esa mujer ya se quedó con varios locales. Tiene antecedentes policiales por estafa. Dónde están las boletas del canon que supuestamente pagó por un año. Me amenazó con la prensa, pero no temo dar explicaciones”, concluyó.