EFE.
Los colonos ingresaron en las tierras que corresponden al Indert acompañados de una comitiva de unos 200 policías y un agente del juzgado de Gaaguazú, según Wagner.
Ante las aproximadamente 200 familias campesinas, el pasado jueves los colonos y los agentes prendieron fuego a sus viviendas y sus cultivos de consumo a lo largo de unas 2.067 hectáreas en distrito de Pastoreo, en el departamento de Caaguazú, según el legislador.
Los campesinos ingresaron hace 9 meses a esas tierras y ya tenían todos sus cultivos listos, con apoyo del Indert y el Ministerio de Agricultura. Ahora se refugian en carpas a un costado del linde de la propiedad.
“La policía no realizó el protocolo debido para desalojar a los compatriotas, que precisamente está previsto para que no ocurran casos como éste”, dijo Wagner.
Según el senador, el oficial de justicia “de apellido Vergara” fue el encargado de hacer cumplir una orden del juez Roberto Villamayor, pero “jamás mostró ninguna orden a los pobladores y solo el sábado facilitó a la jefatura de policía de Coronel Oviedo dicha orden”.
“Este mismo Vergara fue el que le prendía fuego a las casas que eran demolidas con los tractores de los menonitas”, aseguró Wagner.
Los menonitas, algunos de origen alemán, ruso, holandés, canadiense y estadounidense, poseen en Paraguay grandes extensiones de tierra, concedidas durante el régimen dictatorial de Alfredo Stroessner (1954-1989) y se dedican en su mayoría a la producción de soja y ganado.
Según la Federación Nacional Campesina (FNC), cerca de un millón de campesinos han sido expulsados de sus tierras en Paraguay y se han visto obligados a emigrar a las ciudades en los últimos diez años a causa de conflictos derivados por la concentración de títulos de propiedad en pocas manos.