Consideró que a su criterio no corresponde otorgar refugio político a los jóvenes liberales que se encuentran en Uruguay. “Para mí, quemaron el Congreso. Es evidente y son personas sometidas hoy a un proceso y se persigue políticamente a quien tiene votos o por cuestiones ideológicas. Acá hay un hecho punible y es diferente. Para mí no corresponde bajo ningún sentido. Quemar un poder del Estado significa un atentado contra la democracia misma. Así también los policías deben ser procesados”, aseveró.
Insistió en la idea de que altos jefes policiales sean procesados por el caso del golpe perpetrado en la sede partidaria y que terminó con la muerte de Rodrigo Quintana.