Las que depusieron fueron las bioquímicas Myriam Antonia Fernández de Correa y Carmita María Franco Riveros.
Ambas explicaron que realizaron el análisis de botellas que contenían un líquido color ámbar, que resultó ser gasoil. Las botellas tenían una especie de mecha.
Igualmente, Fernández explicó que realizó pruebas de nitritos y nitratos para determinar si los procesados habían o no disparado armas de fuego. Explicó que buscaban los componentes de los disparos, que son plomo, bario o nitrito, conforme sus explicaciones.
El interrogatorio se alargó y fue lento, por las preguntas y oposiciones que se realizaban entre la fiscalía y las defensas, que ya se hace habitual.
JURAMENTO. Por otro lado, también juraron ayer las sicólogas Graciela Zelada, Celso Vera, Gustavo Mendoza, Florentina Ramírez y Gabriela Alvarenga. Además, juró la siquiatra Adelaida Núñez. Todos deberán realizar un estudio sicológico e incluso siquiátrico a los procesados.
Algunas de las peritas explicaron que ya conocían a algunos de los procesados, ya que les hicieron un examen cuando habían realizado una huelga de hambre en la prisión a raíz del proceso.
La defensa insistió en que estas peritas no tomen a los mismos acusados y que el examen sea realizado preferentemente en guaraní.
Los jueces Manuel Trinidad Zelada, Samuel Silvero y Benito González dispusieron que sean incluso acompañados de traductores para el trabajo, ya que algunos de ellos no hablaban fluidamente el guaraní.
Hasta el momento, declararon 49 testigos, pero aún faltan declarar varios que fueron citados y no se presentaron, además de los que serán citados aún. En total, son más de 260 testigos los que deben prestar declaración, según el auto de apertura a juicio oral. El juzgamiento continuará el próximo martes.
Se investigan las muertes de 11 campesinos y 6 policías ocurridas el 15 de junio de 2012, en Curuguaty.