Uno de los cursos se resguarda bajo los robustos árboles, mientras otro grupo de secundarios desarrolla las lecciones en un pasillo.
La situación se da por el riesgo de derrumbe de dos salas de clase que fueron construidas hace apenas dos años bajo la administración del colorado Roberto Cárdenas.
Uno de estos espacios costó la suma de G. 149 millones.
Los docentes manifestaron en contacto con Noticias Py que de momento no tienen respuestas acerca de la instalación de aulas móviles o alternativas ante la gravedad del caso. Con el frío, el riesgo de contraer cuadros respiratorios crece en la intemperie, donde permanecen desde el inicio de clases, poco después de las 7.00. La salida es recién a las 13.00.
El principal problema de la infraestructura de los salones construidos en el 2015 con recursos del Fonacide es la falta de soportes en los techos.
ALERTA ROJA. La alarma está en su punto más alto en cuanto a infraestructura, según apuntó la directora de la institución educativa, Carina Fernández.
“Los funcionarios del MEC y de la Municipalidad prometieron venir desde el lunes a hacer estudios del piso, instalar baños móviles y paneles que serán utilizados como aulas”, comentó.
Indicó que forman parte de un proyecto de la cartera educativa donde a través de la responsabilidad social empresas intervienen en los centros escolares como Ava Mba’e.
“La parte más golpeada es el nivel medio, donde no hay un director que esté todo el día con los alumnos (cuentan con encargado de despacho), y todo el pabellón que está encima de otras salas se encuentra en riesgo”, lamentó.
Pero los salones de la escolar básica, que son más antiguos, ya comienzan a tener filtraciones de agua que generan humedad.
