“Son más de treinta años de trabajo, no es fácil”, dijo.
No quiso ahondar en detalles ni razones de la deuda de más de un millón de dólares a su favor. “Eso es algo muy personal, hay cuestiones de familia”.
Negó en todo momento que tenga negocios con Silvio Riveros, dirigente envuelto en escándalos de corrupción. “Ese préstamo fue antes de que él tenga problemas”, dijo Cuevas.
Sin embargo, el año en el que el gobernador le hizo el préstamo a Riveros coincide con la época en que el dirigente de los productores retiraba jugosos fondos del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Miguel Cuevas también está inhabilitado para firmar cheques hasta el año 2016.
La inhabilitación fue en enero de 2013, y la causal corresponde al artículo 13 de la Ley de Cheques: “La persona que libre un cheque bancario, propio o en representación de una persona física o jurídica, contra una cuenta corriente cancelada o en talonario de cheque bancario ajeno o adulterado, será inhabilitada por tres años para operar en cuentas corrientes bancarias”.
Cuevas había negado el caso y dijo en su momento que no firmaba cheques “por falta de tiempo”.
Varios son los arrastres que tiene el gobernador en términos judiciales.
Según las informaciones comerciales, cuenta con tres demandas, de las cuales dos suman G. 658 millones. Una de ellas entabló Blanca Sosa de Rolón, directora de una escuela donde Cuevas suspendió el almuerzo.