Tras una serie de allanamientos realizados en la mañana de ayer, agentes de Antisecuestro de la Policía Nacional a cargo del jefe, comisario principal Gilberto Fleitas, y la fiscala Sandra Quiñonez, detuvieron a varias personas que serían miembros de una banda de extorsionadores que se hacían pasar por gente del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), e incautaron evidencias.
En una vivienda ubicada en el barrio Fátima de Curuguaty fueron detenidos los hermanos Joaquín (29), Roque (21), y Noelio Asunción González Zárate (19), de quienes fueron incautados varios aparatos celulares.
En simultáneo, fue allanada una vivienda ubicada en el mismo barrio de la ciudad de Curuguaty, donde se levantaron varios indicios como celulares y otros. Posteriormente, en la vía pública del barrio Ciudad Nueva de Curuguaty, fue detenido el cuarto supuesto integrante y líder del grupo criminal, de nombre Carlos Alberto Chávez (24), domiciliado en la misma ciudad, con antecedentes penales por robo agravado, hurto, extorsión y otros, y se incautó de su poder aparatos celulares utilizados para la comisión del hecho. También fue detenido con él Roque Colmán.
PISTAS. El procedimiento se realizó en prosecución de varios hechos punibles de asociación criminal, extorsión y otros, ocurridos en distintas zonas del país, de los que fueron víctimas cinco personas, con hechos consumados, y donde se sindica como autores a los detenidos en este procedimiento.
En prosecución de esta misma causa penal, se realizó otro allanamiento en la cárcel de Misiones, que estuvo a cargo del fiscal Federico Delfino y personal de Antisecuestro. Del penal se incautaron importantes indicios para proseguir con la investigación y llegar al esclarecimiento de los hechos. Una mujer convicta fue involucrada en estos hechos.
La fiscala Sandra Quiñonez dijo que los detenidos se hacían pasar por integrantes del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) para consumar sus hechos, y las víctimas hasta vendían sus pertenencias para cumplir con las exigencias de los extorsionadores.
Por su parte, el comisario Gilberto Fleitas refirió que las víctimas llegaron a pagar hasta 50 millones de guaraníes.