19 abr. 2024

Críticas a intenciones reeleccionistas se dan en debate en el TSJE

Durante el cierre del Taller de Actualización de Liderazgo Político, que organizó el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), se realizó ayer un debate con figuras del ámbito político y periodístico nacional, quienes cuestionaron duramente las pretensiones reeleccionistas de manipular la interpretación de la Constitución Nacional para favorecer a intereses particulares, en alusión al presidente Horacio Cartes, así como al ex titular del Ejecutivo Fernando Lugo.

Cierre.  Luis Ángel González Macchi, durante la clausura del taller organizado por el TSJE.

Cierre. Luis Ángel González Macchi, durante la clausura del taller organizado por el TSJE.

Los expositores fueron el ex presidente de la República Luis Ángel González Macchi; los ex legisladores Luis Guanes Gondra y Enrique González Quintana, así como el periodista Benjamín Fernández Bogado y la ex representante ante el Banco Mundial María José Rolón.

González Macchi señaló que solamente hay una interpretación de la Constitución Nacional, en alusión a la prohibición de la reelección, y que las demás son interpretaciones interesadas, como el caso de los abogados de Lugo.

Dijo que los miembros de la Corte Suprema de Justicia podrían ser objeto de un juicio político en el caso de que se habilite a los ex mandatarios pujar por una reelección.

Por su parte, el ex senador por el Unace y ex presidente del Congreso Enrique González Quintana –también ex dirigente colorado y hoy miembro del Partido de la Juventud– recordó cómo la figura de la “certeza constitucional” o las violaciones a la Constitución, se dieron desde el año 1998, con el fraude que arrebató la victoria a Luis María Argaña en las internas coloradas, así como la propia presidencia de Luis González Macchi, tras la renuncia de Raúl Cubas, la candidatura de Fernando Lugo siendo aún religioso, y la propia candidatura a senador del entonces presidente de la República Nicanor Duarte Frutos.

Fernández Bogado cuestionó duramente a la clase política, indicando que es una vergüenza cómo se está perdiendo el tiempo en una interpretación constitucional mientras el país se arrastra en el atraso producto de la visión retrógrada y la excesivamente baja inversión en la educación, en un país que sigue endeudándose, pero no puede ejecutar el 20% del dinero que ya tiene para obras públicas.

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