En silla de ruedas por una lesión y hablando en cadena nacional, Fernández explicó que la reforma de los servicios de inteligencia responde a la necesidad de “transparentar un sistema que no ha sido de diligencia y no ha servido a los intereses nacionales”.
La nueva Agencia tendrá entre sus competencias investigar sobre terrorismo, tráfico de armas, ciberdelitos, trata de personas, narcotráfico y delitos contra el orden económico y financiero.
La mandataria defendió su gestión para transparentar el atentado a la mutual judía AMIA, ocurrido en 1994, señaló que luego del convenio con Irán “salieron los demonios” y se inició una inédita persecución de jueces y fiscales en tiempos de democracia en la Argentina.
Recordó que no se levantaron las alertas rojas contra los iraníes sospechados de estar detrás del ataque que costó la vida de más de 80 personas.
Sobre la denuncia hacia su persona, que Alberto Nisman iba a exponer ante congresistas, señaló que se trata de un escrito descabellado.
“El fiscal Nisman nos acusó de confabular un tratado internacional para darles impunidad a los iraníes a cambio de granos. No hay un solo abogado que pueda creer que eso haya sido escrito por un fiscal. Es descabellado. Los argumentos son absurdos”, sentenció.