“El grado de las declaraciones no es compatible con la excelencia de las relaciones entre Brasil y Uruguay”, dice un comunicado emitido ayer a la tarde por Itamaraty.
Según declaraciones del canciller uruguayo a la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Diputados de su país, cuando su par brasileño José Serra visitó Montevideo el 5 de julio, este había dicho en conferencia de prensa que Brasil haría “una gran ofensiva” comercial en África subsahariana e Irán y quería llevar a Uruguay como “socio”. A cambio, pidió al Gobierno de Tabaré Vázquez dejar en suspenso el traspaso de la presidencia del Mercosur a Venezuela.
Nin Novoa acusó al Gobierno de Brasil de querer “comprar el voto de Uruguay” al pretender que se suspendiera el traspaso de la presidencia temporal del Mercosur a Venezuela, a cambio de futuros acuerdos comerciales, según reportan la prensa uruguaya y las agencias de noticias.
Paraguay recurrió al mismo procedimiento diplomático, cuando el presidente Nicolás Maduro en un discurso acusó que su país era perseguido por la “oligarquía paraguaya corrupta y narcotraficante”. También llamó a consultas al embajador paraguayo en Caracas, que permanece en Asunción.