La abogada Sun Young Bang, que representa a los asociados y funcionarios, recordó que el año pasado se intervino la entidad tras detectarse un vaciamiento de G 43.000 millones.
“Ya no hay manera que se pueda salvar a esta cooperativa; mañana se podrá elegir a los liquidadores para lo que hay de edificio y se pueda vender, se venda y pagar así a los ahorristas y proveedores”, señaló.
Comentó que el martes, en horas de la tarde, cuatro ex directivos de la entidad ingresaron de forma ilegal a la sede de la cooperativa y se encerraron en el edificio, presuntamente para una quema de archivo, que derivó en una intervención fiscal.
Un grupo de funcionarios y socios se manifestaron ayer frente a la sede de la cooperativa pidiendo cobrar sus haberes y recuperar ahorros.