La agrupación política liderada por Efraín Alegre, tiene pensado hacer una asamblea acorde al tiempo actual. Contará con 570 convencionales acreditados, más la presencia de las autoridades y afiliados.
Según el nuevo administrador, Javier Morínigo, una de las innovaciones del encuentro será la escenografía, donde Alegre se colocará al mismo nivel de los miembros convencionales, de modo a demostrar una suerte de comunión y unidad entre los liberales.
El costo de la convención del sábado será mucho menor a la que eran realizadas por el llanismo, en particular a la que se llevó a cabo cuando el PLRA subió al poder en 2012 cuando y el costo de la asamblea partidaria llegó al doble.
Polarización. Uno de los puntos centrales del encuentro será ratificar la negativa a la reelección presidencial por vía de la enmienda como también de la reforma. Es en el único caso que los liberales tienen unidad de criterio, además de la necesidad de hacer alianzas con miras al 2018.
En cambio, no hay acuerdo para cambiar el estatuto de modo a endurecer las sanciones disciplinarias.
El ambiente de crispación se acrecienta si se toma en cuenta que los llanistas prácticamente ya no tienen incidencia en las decisiones de cúpula, luego de que Efraín haya logrado el respaldo de Salyn Buzarquis, la tercera fuerza partidaria. Esta alianza le permite a Efraín tener la mayoría de 370 convencionales contra 200 de los llanistas.
TEI. El Tribunal Electoral Independiente presentó nuevas autoridades, encabezada por Nuria Isnardi e integrada por Gerardo Benítez Stewart, Antonio Ocampos, Fabían Martí y Rodney Zorrilla. Este tribunal no lo integran los llanistas.