Esto a raíz de que ya fue condenado a cuatro años de cárcel por estafa y producción inmediata de documentos públicos de contenido falso en mayo del 2008 por un Tribunal de Sentencia.
Según había alegado la fiscala Victoria Acuña, durante el juicio oral y público, el hombre había causado un perjuicio de 1.400 millones de guaraníes al Estado paraguayo al expedir indebidamente certificado de crédito tributario.
En tanto, en una segunda causa fue acusado por los supuestos delitos de evasión de impuestos y producción de documentos no auténticos.
Aguilera, quien era miembro del Grupo de Auditoría Especial de Crédito Tributario del Ministerio de Hacienda, elaboró informes y dictámenes falsos para beneficiar a Gustavo Javier Martínez Ozuna, quien había sido sentenciado también, pero en un procedimiento abreviado.
estructura criminal. Según comentó la fiscala antidrogas Lorena Ledesma, Aguilera –imputado por lavado de dinero y asociación criminal– ayudó a Da Rocha a crear las firmas de maletín. Esto se desprende de la presunción de que el hombre se dedica a la venta de empresas con elevado capital social para integrar a sus patrimonios activos adquiridos presumiblemente mediante actividades vinculadas al tráfico de estupefacientes.
Incluso, Aguilera ofrecía las sociedades anónimas desde una página de internet.
La fiscala Lourdes Bobadilla, quien allanó su estudio contable, encontró varias documentaciones relacionadas con las empresas BioBras-Biocombustible Brasileño SA, cuyos directivos serían su esposa Juana Estela Cardozo y su hermano Luis Aguilera, pero en realidad serían firmas de Da Rocha, según aseveró.