El consorcio integrado por la empresa Rovella Carranza (Argentina) y Talavera y Ortellado (Paraguay) se encargará de ejecutar las obras de la segunda etapa del acueducto del Chaco, por USD 28 millones. Se trata del mismo consorcio que está ejecutando la reconstrucción de la ruta 9, más conocida como Transchaco, en el tramo La Patria-Infante Rivarola.
El trabajo se iniciará en mayo, según informó a este medio el ingeniero Hugo Ruiz, de la Dirección de Agua Potable y Saneamiento (DAPSAN) del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). Es financiado por la donación de la Agencia Española de Cooperación Internacional (Aecid) y por un préstamos del BID.
El funcionario explicó que se prevé la construcción de la aductora Loma Plata-Pesempoó, la construcción de un tanque elevado y la red de distribución para una comunidad indígena –ubicada en las afueras de Loma Plata–, así como el transporte del agua hasta otros tres centros urbanos, como Filadelfia, Neuland y Lolita. En total se colocarán 190 km de tuberías.
Señaló además que ya se firmó el contrato con la contratista, que ya estará solicitando el anticipo correspondiente la próxima semana, con lo cual se dará la orden de inicio a principios de abril. Este proyecto tiene como meta llevar agua a 70.000 personas en el Chaco, de las cuales 45.000 corresponden a comunidades indígenas.
Por otro lado, ya se realizó la apertura de ofertas de la licitación para la fiscalización de las obras de esta segunda etapa del acueducto y las empresas que están en competencia son el consorcio Consul Tech Aetos y el Consorcio Hydea Hidrocontrol.
Estas ofertas están siendo evaluadas por el comité de evaluación y se adjudicaría en la brevedad posible.
Atrasos. El proyecto Acueducto para el Chaco Central es una obra largamente anhelada por los habitantes de esa zona del país, zona caracterizada por la falta de agua superficial y la presencia de agua subterránea con gran contenido de sal, lo que no la hace apta para el consumo humano.
El proyecto ha sido dividido en tres etapas, de las cuales está en ejecución la primera fase que consiste en poner a disposición agua potable en el centro del Chaco, para lo cual ya se construyó una toma de agua cruda del río Paraguay, en la ciudad de Puerto Casado, una planta de tratamiento (potabilización) de agua y las instalaciones para la impulsión del agua tratada hasta los reservorios ubicados en la localidad de Loma Plata.
Sin embargo, a cuatro años de inicio de los trabajos aún no se pudo concluir. Esta etapa es financiada exclusivamente con fondos del estado paraguayo y tiene un avance del 75%, según Ruiz, y se espera culminar a finales de este año.
El motivo del atraso de esta parte es que la empresa adjudicada para la provisión de caños quebró y no cumplió con el contrato, por lo que fue rescindido. Por este motivo el MOPC realizó otro llamado para proveer del vital insumo, pero nuevamente registró imprevistos, ya que uno de los oferentes que quería ganar protestó.
La segunda etapa se iniciará en breve y la tercera fase del proyecto aún debe ser licitada, esta consiste en la distribución de agua potable en las ciudades de Filadelfia, Neuland, Villa Choferes del Chaco, Cruce Los Pioneros, Tte. Irala Fernández y Lolita, así como a 85 comunidades indígenas en el Chaco Central, la mayoría de las cuales se abastecerán a través de la aductora secundaria Loma Plata-Lolita.