Durante el juicio, la agente fiscal María Rosa Arzamendia demostró la culpa y reproche del acusado por el hecho punible de homicidio doloso.
El colegiado estuvo presidido por el magistrado Carlos Antonio López y como miembros los jueces César Acosta Maldonado y Mario Miranda. Los magistrados alegaron que Cabrera decidió terminar con la vida de su víctima a tiros de arma de fuego y machetazos, con quien discutió airadamente tras una ronda de tragos.
el caso. El suceso criminal se registró en la noche del 31 de julio de 2016, en la vivienda del inculpado, en la compañía Jaguareté Corá, distrito de Yuty. Cabrera desenfundó un arma de fuego, tipo revólver de calibre 38, y efectuó siete disparos contra Tandí Cabrera, quien también acusó 21 heridas graves que se le infligiera con un machete.
Personal policial de aquel distrito se constituyó en el lugar de los hechos, donde encontró al autor sentado en una silla y a metros de él, el cuerpo de su víctima. Posteriormente, dio aviso al Ministerio Público para los trabajos de rigor.
Cabrera negó en principio haber tenido un arma de fuego, pero luego confesó que la arrojó cerca de un árbol detrás de la casa, y el machete al costado de un pozo.