Con los decibeles a la baja, tras el veto presidencial del impuesto a las exportaciones de granos, el sector productivo lanza oficialmente hoy la campaña sojera 2013/2014 en la localidad de San Cristóbal, Alto Paraná, área de influencia de la Cooperativa Pindó Ltda.
Vale recordar que la soja sigue siendo el principal producto de exportación del país, generando negocios por más de USD 4.000 millones por temporada. La contrapartida es que se trata de un sector que acumula mucha riqueza en manos de pocos.
La presente campaña tendrá puntos diferenciados con relación a las anteriores, porque a partir del 2014 comenzará a regir la generalización del IVA y la aplicación del Impuesto a la Renta Agropecuaria (Iragro), que deberá imprimir mayor eficiencia de los productores, para cubrir estas nuevas cargas impositivas.
Este acto de lanzamiento, en principio, sería tomado como una medida de fuerza en contra de la determinación del Congreso de aprobar el impuesto a las exportaciones de granos; sin embargo, con el veto presidencial, los ánimos están mínimamente calmados, aunque aún existe una férrea oposición al punto de referencia, a la transferencia de precios de embarque de la soja, que es poco claro y solo ha ocasionado trabas en el sistema perfecto de comercialización de los granos, indicó Ramón Sánchez, presiente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
En términos generales, la superficie de soja esperada estaría rondando las 3,1 millones de hectáreas, área similar a la anterior. En la zafra 2012/2013, Paraguay produjo unas 9,3 millones de toneladas, lo que representó una cosecha récord para el país. Para esta zafra que arranca se prevé una producción de 8,4 millones de toneladas, según datos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).
precios. La caída de la cotización internacional de la soja también es otro factor que acompaña a los productores, junto al nuevo escenario en la parte impositiva. A este escenario se suma la aparición de una plaga perjudicial para los cultivos de soja y otros rubros agrícolas, que puede representar un costo adicional para repeler el mal o, en contrapartida, puede generar daños por los ataques en el periodo de desarrollo de la oleaginosa.
En cuestiones climáticas, el sector productivo espera importantes lluvias durante el transcurso de la zafra; sin embargo, existen pronósticos de fuertes tormentas durante los próximos 120 días.
En San Cristóbal, la Cooperativa Pindó Ltda., junto con la Federación de Cooperativas de Producción (Fecoprod), organiza el lanzamiento de la zafra sojera, que renueva las esperanzas del sector.
