Así lo señaló el intendente Mario Ferreiro, al referirse a los cuestionamientos de un amplio sector de familias de la Chacarita, principalmente de las zonas de San Pedro, San Felipe y San Vicente, quienes hablan de mala calidad de los materiales empleados para materializar esas casas.
El jefe comunal sostuvo que “si hubiera error de estructura, de diseño, y que atente contra la seguridad de las personas, tenemos la potestad de intervenir. Hasta ahora lo que tenemos está dentro de las normas vigentes y dentro de lo estipulado”.
“Siempre antes de que se entregue una obra hay una revisión final y nosotros vamos a hacerla. Vamos a garantizar la seguridad de esas viviendas para las familias que vayan a habitar ese nuevo barrio capitalino”, insistió el intendente.
Ayer, numerosas familias de Zeballos Cué se manifestaron en uno de los accesos a este núcleo poblacional en construcción, en protesta por haber quedado excluidas del proyecto encarado por la Itaipú y la Senavitat.
Las mismas reclaman a las autoridades cumplir con su promesa de otorgar un espacio en ese lugar.