El comisario Jorge Ignacio Zárate Barreto declaró ayer ante la fiscala Pamela Pérez y admitió que firmó el acta de procedimiento de la madrugada del pasado 13 de agosto, donde se le hirió al joven Richard Ramón Pereira Ramírez, a sabiendas de que no era la realidad. El mismo se lava las manos y culpa a su subalterno.
“En ningún momento vi que el joven Richard Ramón Pereira Ramírez tenía arma de fuego en su mano ni en el suelo, ni escuché que se haya percutido”, mencionó en su declaración indagatoria.
Sin embargo, el alto jefe policial firmó el acta que decía que la víctima atacó con disparos a la patrullera y que hallaron droga en el vehículo de Richard.
Recalca que el suboficial 1º Jhonie Osvaldo Orihuela Chávez puso un arma de fuego calibre 9 mm sobre la mesa de su oficina y manifestó: “Con este gatilló seis veces o cinco y esta es el arma”. Luego refirió Zárate: “Yo sabía que no era cierto, pero en ese momento estaba fuera de mí emocionalmente y le dije, ‘bueno’”.
También comentó que el personal de Criminalística realizó el levantamiento del arma y posteriormente revisó el automóvil del joven, donde encontraron una bolsita.
“En un principio me dijeron ‘no hay nada jefe’. Cuando me fui hacia la guardia y volví me dijeron ‘encontramos esto’ y me mostraron una bolsita que contenía otras bolsitas y fue ahí que ordené que venga gente de antinarcóticos”, expresó el comisario.
Asimismo, Zárate confirmó la declaración de Richard que había manifestado que Orihuela le obligó a que agarre el arma y dispare, pero que ante su negativa se disparó cerca de sus manos.
“Yo escuché dos disparos que provenían de la carrocería, en el trayecto al hospital a la altura del cementerio del Sur, específicamente sobre la calle Yegros”, añadió.
Finalmente, el ex jefe de la Comisaría 4ª Metropolitana expresó: “Durante toda mi carrera siempre estuve preparado para un enfrentamiento, pero no estaba preparado para que mi propio personal le dispare a una persona que no estaba armada. Todo esto me apenó enormemente”, concluyó.
Por otra parte, Orihuela se abstuvo a declarar.
Procedimiento. El 13 de agosto a las 4.30 el comisario Jorge Zárate y el suboficial Orihuela se encontraban realizando un recorrido en patrulla, cuando ambos observaron un vehículo de la marca Peugeot, color bordó y negro sin chapa que se desplazaba por la Avenida 5ª de la capital. Luego de una persecución, lograron detener a Richard. Orihuela lo habría reducido primero contra el vehículo y posteriormente lo obligó a que se arrodille y lo tiró al piso boca abajo, ínterin en que realizó un disparo, impactando el proyectil en la espalda, de cuya consecuencia quedó parapléjico.