Este viernes se realizó una conferencia de prensa en la Comandancia de la Policía para dar detalles sobre el procedimiento con el que se produjo la mega incautación de 847 kilos de cocaína de alta pureza.
El ministro del Interior, Francisco De Vargas, expresó que este tipo de procedimientos no se logran todos los días y que hay detrás un trabajo interinstitucional que investigó el caso para llegar finalmente al objetivo. Indicó además que el perjuicio para los narcodelincuentes rondaría los USD 100 millones.
“Estamos hablando de casi una tonelada de cocaína de alta pureza, esto supone un golpe y una pérdida importantísima al narcotráfico, estamos hablando de un perjuicio a estas estructuras de más de USD 80 a 100 millones”, señaló.
Sostuvo que el siguiente paso es individualizar a los responsables y ponerlos a disposición de la justicia para que reciban la condena correspondiente. “Hablamos de un hecho punible que viene de la mano del crimen organizado transnacional. Un flagelo que azota al mundo entero”, manifestó De Vargas.
Sobre el origen de la droga, indicó que presumiblemente sea proveniente de Colombia y en este caso Paraguay se constituye en un país de tránsito ya que la droga tenía como destino final el Congo, en África.
Por su parte, Javier Díaz Verón, fiscal General del Estado, señaló que continuarán las investigaciones para dar con los responsables. “La idea es hacer referencia a los bienes que poseen producto de los ilícitos, para hacer el decomiso de rigor y romper esta estructura criminal”, sostuvo.
Indicó que es la tercera o cuarta vez que este tipo de organizaciones criminales utilizan puertos privados para tratar de enviar drogas a otros países.
“En este puerto llama la atención que ya vieron más de una oportunidad de exportar droga entre productos normales, por eso necesitamos al sector privado, que colabore en la investigación”, expresó.
Antecedentes. En la tarde del jueves, un cargamento de 847 kilos de cocaína de alta pureza fue decomisado en la zona primaria del puerto privado Fénix, en Zeballos Cué. Los paquetes de la droga estaban ocultos en bolsas de 50 kilos de arroz a granel que tenían como destino África, según los investigadores.
Uno de los responsables del cargamento quedó detenido, se trata del despachante de la mercancía, Ricardo Manuel Benítez (50), de la Transportadora Warring SRL.
Según los documentos de despacho de exportación, la mercancía tenía como destino el Congo y el destinatario estaba a nombre de la empresa Okami Sarl, presumiblemente ficticia.
El procedimiento estuvo encabezado por el fiscal Isaac Ferreira, así como por personal de CAIA (Aduana) dirigido por Nelson Báez; mientras que el trabajo de investigación e inteligencia estuvo a cargo del SIU (Unidad de Inteligencia Sensible).
