Cabral, recordada por sus papeles en la pantalla chica en series como Sombras en la noche y Nuestros fantasmas, que data de los 90, interpreta en la película a una mujer misteriosa que vive cerca de los Saltos del Monday y que afirma ser una poderosa médium.
Ella comentó a los medios que inicialmente no iba a actuar en la producción, pero que se involucró en el proyecto tras una invitación de Liz Cramer, quien le habló sobre el emprendimiento fílmico de unos jóvenes de Ciudad del Este.
“Me mostraron el proyecto ya como un avance o tráiler, el cual me sorprendió por el despliegue de lugares, tomas aéreas y otras cosas. Fue así que me comprometí a asesorarlos, y al poco tiempo, me atraparon y ya estaba filmando con ellos como actriz, además de asesora”, señaló.
Cabral recordó sus tiempos cuando participara en las series televisivas Sombras en la noche y Nuestros fantasmas y dijo que estas eran de temática de suspenso y no de terror como Gritos del Monday.
“Eran series televisivas de suspenso y misterio, mitos y leyendas. Fueron capítulos de 48 minutos que terminábamos en una noche y un día, con una sola cámara. En cambio, Gritos del Monday tiene mucho suspenso y terror, pero es un largometraje, que requirió casi tres años de trabajo, con diferentes escenarios y lugares del país, y con una tecnología muy avanzada”, expresó.
La cinta se rodó en Presidente Franco, Ciudad del Este, Minga Guazú, Hernandarias, Asunción, Santa Rita, Encarnación, Hohenau, San Cosme y San Damián, reducciones jesuíticas de Jesús y Trinidad e Itacurubí de la Cordillera.
ARGUMENTO. El filme muestra a un grupo de estudiantes de Ingeniería Ambiental que acampa en las inmediaciones del río Monday para realizar un trabajo. Durante la noche, escuchan un grito. Luego, Viviana (Solange Méndez Flores) presencia un momento que desencadenará en su vida una situación agobiante anormal que llevará a sus padres a buscar ayuda en la pseudociencia.