El doctor Jorge Giubi, director del Hospital, comentó que el medicamento que fue aparar a una farmacia es un ansiolítico denominado midazolam, que sirve para la sedación de pacientes que generalmente se encuentran en terapia intensiva o en anestesia.
Explicó que un médico detectó la situación el fin de semana cuando el familiar de un paciente internado entregó el fármaco solicitado al profesional de enfermería, entonces se pudo constatar que había borrones en el logo de uso exclusivo de la Facultad de Medicina.
“Queremos aclarar quienes corresponde, autoridades de esta prestigiosa institución y a la opinión pública que no vamos a apañar ningún tipo de irregularidades en nuestra administración y que cualquier funcionario que sea detectado en actitud ilegal será sancionado como corresponde”, indicó.
Actualmente, las autoridades iniciaron una auditoría general en todos los servicios del hospital a fin de detectar el lugar de salida de estos insumos y responsables.
El fármaco midazolam –explicó Giubi– habitualmente está disponible en la farmacia de Clínicas, pero por inconvenientes con la empresa proveedora se encuentra en falta en estos momentos y por esto se ven obligados a pedir la compra a los familiares de los internados.
Asimismo, el director comentó que este medicamento es de alto uso, pero de costo medianamente accesible, es utilizado en áreas específicas como anestesia y terapia intensiva, por lo que se considera que el negociado podría pasar por la excesiva demanda de utilización.
A pesar de no contar con una certera versión de los hechos, las autoridades del Hospital no descartan la probabilidad de fuga de otros medicamentos, a pesar de contar con un sistema de registro de entrada, salida y retiro de medicamentos.
Tras este hecho se redoblarán los controles a fin de resguardar los insumos de usos exclusivos.