24 abr. 2024

Cerro Porteño es campeón y el país una verdadera fiesta

Con el abrazo de su pueblo y a ritmo de carnaval, Cerro Porteño remontó a un aguerrido Sol de América para cumplir con lo previamente deseado y levantar la brillante y prominente estrella número 32 en la Catedral del Sentimiento.

Cerro Porteño es por antonomasia el club del pueblo y tal afirmación no será una mera locución de línea de periódico digital. Si se nos permite, a las visibles pruebas diarias nos remitimos y con esto damos paso al nuevo logro de la entidad que semana tras semana viste de azul y rojo cada comunidad del Paraguay, cada rincón del país.

O al menos eso se hizo sentir, una vez más, desde tempranas horas en las inmediaciones del Barrio Obrero, cuando a lo largo de la Avenida Rodríguez de Francia las medias calzadas a la altura de las calles Estados Unidos, Brasil y hasta Paraguarí se encontraban copadas por buses llegados de todas partes.

Situación que se complementó desde que Eber Aquino dio rienda suelta a la alegría con el pitazo inicial, pese a que la visita tomó la iniciativa y se adelantó en el marcador a los 10', por obra y gracia de Javier Toledo.

Un minuto antes, Diego Churín tuvo el primero del partido, pero malogró y la réplica se mostró inmediata.

El tanto de Toledo golpeó duro a las expectativas y la algarabía tribunera conoció un momento importante de nerviosismo, sin embargo los dirigidos por Leonel Álvarez supieron remarla de atrás y en base a reiterados centros al área igualaron las cosas.

Fue sobre los 26', tiempo en que el argentino Churín tendría su revancha individual y como acostumbra: no la desaprovecharía.

En su zona de confort, el delantero fue más que toda la contensión rival y alto arriba conectó un envión de Fabián Franco para establecer la paridad e intentar encaminar la historia hacía el título número 32 de la institución cuya camiseta viste con la idolatría conquistada a base de goles (10 en la presente temporada).

No obstante Sol de América, que no bajó la guardia haciéndose incluso levemente superior en los minutos finales de la etapa inicial, volvería a golpear.

Esta vez el reloj marcaba los 47' y un tiro lateral de Velázquez, asistido por la buena voluntad del mismo Leonel, habilitó a Vargas, éste levantó para Zeballos que bajó bien y dejó el arco a disposición para el doblete de Toledo (1-2).

Amargo trago proporcionado por el cuadro de Héctor Marecos, que con la victoria parcial se convertía en el primero en hacer tres puntos en La Nueva Olla, pero las ganas quedaron en el intento, puesto que que sobre los 60' el estratega colombiano mandó al campo a Jorge Rojas, en reemplazo de Josué Colmán.

Quién iba pensar que en la cabeza de Rojas estaría el punto que consagraría a Cerro, quien igualó el score a los 67' y desató la locura en las gradas.

La paridad esfumó la tensión que se vivía entonces en la cancha y a los 80' el Ciclón encontraría su merecido premio. Una falta penal concedida por Aquino quedó en pies de Churín, para que con sobriedad supera la estirada de Ortiz y el cántico de clamor folclórico por dar la vuelta este año en la Olla Azulgrana se haga realidad.

Una hermosa certeza que corona el trabajo de un plantel de jugadores y distintos profesionales de todas las áreas que lo componen, así como de una dirigencia que hizo méritos para que el crecimiento del deporte nacional marque otro récord en la fecha y más de 44.000 personas asistan a semejante espectáculo.

En el registro, Cerro Porteño cerró la campaña con 14 victorias, 3 empates y 4 derrotas. Antony Silva; Fabián Franco, Marcos Cáceres, Ignacio Pallas, Santiago Arzamendia; Josué Colmán (60' x Jorge Rojas), Rodrigo Rojas, Juan Aguilar, Óscar Ruíz (85' x Nelson Haedo); Alfio Oviedo (69' x Marcos Riveros) y Diego Churín fueron concretamente los últimos artífices de esta estrella.