19 abr. 2024

Cerro gana en La Arboleda y alcanza en la cúspide a Guaraní

Dirigido por un sensacional Jonathan Fabbro, autor de un gol y de una asistencia, Cerro Porteño derrotó 2-0 a Rubio Ñu por la fecha 11 del campeonato Apertura y alcanza a Guaraní en el punta de la competencia.

El Azulgrana enlazó este lunes ante Rubio Ñu en La Arboleda su quinto triunfo consecutivo y confirmar sus buenas sensaciones en la fecha 11 del campeonato Apertura. Con este resultado (0-2), el conjunto de Barrio Obrero caza a Guaraní en la cúspide de la competencia. Ambos acumulan 25 unidades.
Cerro Porteño aprovechó su momento en el primer tiempo y tras un penal sobre Jonathan Santana, un Fabbro sensacional puso arriba al Ciclón en Santísima Trinidad. Rubio Ñu despertó tras la desventaja, creó sus ocasiones, pero no consiguió el premio de la igualdad.
En el complemento, el equipo del Tiburón completó su trabajo a los 78' cuando Guillermo Beltrán hizo el segundo tras una magnífica habilitación de JF17. El segundo tanto desvaneció por completo las intenciones del Albiverde, que aceptó la derrota y ya no se asomó hacia el arco de Barreto.
EL PARTIDO. Roberto Torres devolvió la titularidad a Diego Barreto tras superar la lesión en el aductor izquierdo y suplió la ausencia de Fidencio Oviedo con Jonathan Santana en la línea de quite, después puso a los mismos integrantes de su equipo de gala que lleva hasta este compromiso cuatro triunfos al hilo.
Cerro Porteño se hizo del mando en La Arboleda, impulsado y dirigido por un sensacional Jonathan Fabbro, que agregó a su talento la cuota del esfuerzo cuando la pelota no pasaba por sus pies. El Azulgrana amenazó el arco de Orlando Rojas cuando un intento de rechazo pegó en un jugador ñuense que Nelson Ruiz tuvo que exigirse para evitar el gol al minuto de juego.
En los primeros instantes, el equipo de Alicio Solalinde sufrió descordinaciones defensivas y tardó en emigrar hacia el terreno enemigo. Lo intentó a los 16' con un remate apresurado del volante Pablo Espinoza que no tuvo otra consecuencia que la de absorber un poco de aire para seguir en la marca.
Por su parte el Azulgrana mantuvo su fuerza ofensiva cerca del área con toques e imponiendo su juego desde los laterales para que los volantes rompan la estructura defensiva por adentro. Así lo hizo Jonathan Santana a los 24', pero fue derribado en el área. Carlos Amarilla no dudó de la infracción y Fabbro no se inmutó para someter a Orlando Rojas.
Después de gol, Cerro se durmió o bien Rubio Ñu se despertó del cachetazo y organizó mejor sus avances. Un remate al travesaño de Cristhian Santacruz acercó al empate (27m ), y motivado por sus tenues logros el equipo de Santísima Trinidad hizo mucho barullo en ofensiva con Alfio Oviedo, en dos oportunidades, y con el obstinado Nery Cardozo.
En el complemento, Solalinde mandó a la cancha una doble sustitución con la idea de mejorar la marca con Robert Piris Da Motta y alzar el peso ofensivo con Claudio Correa. Tiburón también movió sus fichas con el ingreso de Blas Cáceres por el juvenil Matías Rojas para dosificar su fuerza por banda izquierda.
Las fricciones y el apresuramiento quitaron precisión y consistencia al partido que estuvo sin dominio por largo rato. Las insinuaciones eran una constante y en ese terreno también se impuso Cerro Porteño con Fabbro y Santana, porque los centros llovidos no inquietaron a Diego Barreto, seguro en su salida por arriba.
A los 66' Miguel Paniagua rompió con el esquema y tras una sensacional con Fabbro se perdió el segundo al fallar en la definición luego de transportar la pelota hasta muy cerca del portero. Los cambios no surtieron efecto y Fabbro se dio un festival, un partido que raya la perfección. JF17 buscó su doblete, pero Rolando Rojas con una tremeda estirada negó el gol a los 73'.
Ante la timidez de la respuesta, el Ciclón manejó la pelota cerca del área y forzó varias faltas, fórmula aprovechada por Guillermo Beltrán a los 78' cuando el delantero remató a gol para sentenciar el encuentro. Después el Gato García y Blas Cáceres pudieron estirar, pero el choque ya estaba decidido desde mucho antes.