La mayoría de las firmas que se presentaron son de España y Brasil, y solo cuatro empresas paraguayas se consorciaron con las multinacionales.
Sin embargo, hasta ahora la Essap no maneja la garantía que dará el Gobierno para el financiamiento de este proyecto de 400 a 500 millones de dólares bajo el amparo de la Ley 5074. En este caso, el contratista deberá buscar financiamiento y ejecutar las obras. Asimismo, todo está listo en cuanto a los terrenos afectados, excepto el de Roque Alonso, donde están negociando, dijo el presidente de la estatal, Osmar Sarubbi.
“Todavía no se determinó la estructura financiera, pero entendemos que eso se va a delimitar en un contrato con la empresa adjudicada”, indicó.
Comentó además que varios son los desafíos de las empresas y Essap para no afectar el tránsito cuando se ejecuten los trabajos, ya que afectarán 450 kilómetros de ruta, que deberán romperse.
Entre los participantes están el Consorcio Acciona Infraestructuras – Acciona Agua (España), Electra LTD (Israel), AT integrado por Aqualia Infraestructura (España), Tecnoedil SA (Paraguay), GYM SA (Perú) y Elecnor SA (España) conjuntamente con Elecnor do Brasil (Brasil).
Además se presentaron José Cartellone Construcciones Civiles SA (Argentina); Isolux-CDD, compuesto por Isolux Ingeniería SA (Argentina) y CDD Construcciones (Paraguay), y el Consorcio Desarrollador Gran Asunción, integrado por la Constructora Norberto Odebrecht (Brasil) y Talavera Ortellado Construcciones (Paraguay).
Se suma el Consorcio OHL-Heisecke, cuyos miembros son OHL SA (España) y Constructora Heisecke SA (Paraguay). También pugnan el Consorcio Mota Engil (Portugal y Perú), Consorcio Planova-Contracta (Brasil) y Aguas de Asunción, alianza entre Hidalgo e Hidalgo SA-Ecuador y Construcción y Administración (Perú).
