“Es preciso reducir gastos de todo tipo que no sean imprescindibles, fomentar una cultura del ahorro y de aprovechamiento eficiente de los recursos disponibles”, dijo el mandatario ayer ante el Parlamento. Desde hace una semana empresas estatales cubanas recibieron órdenes ejecutivas de reducir 50% sus gastos de combustible y electricidad, lo que avivó el temor del retorno a la crisis de los años 90 con prolongados apagones y la parálisis del transporte y la industria. “No negamos que pueden presentarse afectaciones, incluso mayores que las actuales, pero estamos preparados y en mejores condiciones que entonces para revertirlas”, dijo Castro al rechazar especulaciones y augurios de un inminente colapso de nuestra economía.
En ese sentido, dijo que se registró un crecimiento de 1% en el primer semestre del año, la mitad de lo previsto, debido a la caída de los ingresos por exportaciones, que marcaron los menores precios del níquel, el incumplimiento de la producción y venta de azúcar, y de otros ingresos previstos. afp