PUERTO CASADO
Más de 60 niños y niñas, latinos e indígenas, asisten mañana y tarde al jardín de infantes María Auxiliadora. Allí concurren los chicos del pueblo para el prejardín, jardín y preescolar.
ÚH evidenció muchas precariedades en el recinto educativo, donde dos docentes se encargan de realizar lo humanamente posible para satisfacer las necesidades básicas de sus alumnos.
Una de las profesoras, Francis Silva, es la directora. Lleva muchos años en la labor de educar a los más pequeños de la comunidad con un rubro del Ministerio de Educación. Su ayudante, la Prof. Alicia Silva, está con honorario que cubre la Comuna.
La institución fue construida en 1954 en épocas de la industria taninera Carlos Casado SA. Lo poco que recibe el Jardín proviene de las personas de buena voluntad y las autoridades, que si bien responden a los pedidos de los padres de familia, aun es insuficiente.
Muchas generaciones de niños del distrito pasaron por este sitio de educación inicial.
Actualmente hace falta un parque infantil que sea seguro, porque el que se tiene es un peligro. El tobogán es de metal y ya causó algunos accidentes. Las hamacas y el sube y baja están en situación deplorable. Carecen de pelotas.
También requieren de mobiliarios, bebederos para agua y ventilador de techo en el salón; los que hay ya no funcionan. El televisor y el DVD que tenían están averiados, para escuchar sus músicas infantiles lo hacen con un pequeño speaker. No tienen juegos lúdicos como rompecabezas; las escasa plastilina reciclada de otros años sirve para moldear algún objeto de imaginación de los chicos.