Por Rocio Cáceres
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Corría el año 1911, cuando la familia italoargentina Ferro Scala, que había llegado 18 años antes a Paraguay, empezó la construcción de la Casa Ferro, donde establecieron un almacén de ramos generales, y donde residieron sus descendientes hasta el 2000.
Hoy, a 122 años de su construcción, con base en el plano del arquitecto Moisés Clari –que se inspiró en el estilo de la época– la Casa Ferro reabre sus puertas, esta vez como una Casa de Cultura.
“Hoy, Casa Ferro se erige como casa cultural, que, sin duda, se convertirá en un espacio propicio para fomentar y difundir el bien supremo de toda sociedad, el arte y la cultura”, destacan los directivos de la casa, presidida por Andrés Ferro Scala.
10 SALAS. El nuevo centro, ubicado en la calle Estrella 1243 casi Don Bosco, cuenta con diez modernos salones equipados para la exposición de cuadros, dibujos y otras actividades, y está a disposición de los artistas nacionales e internacionales.
En estos espacios se exponen artículos que pertenecieron el matrimonio conformado por el italiano Franccesco Ferro y Santina Scala, uno de los primeros en llegar a Paraguay.
Se pueden apreciar fotografías antiguas, muebles de la época, pinturas, una colección de relojes, ventanas y alacenas, réplicas en miniatura de los primeros vehículos que llegaron a Paraguay y otras obras de arte y objetos de colección, que pertenecieron a la familia, y que guardan muchas historias.
En una de las salas se puede apreciar también una colección de publicidades antiguas, en especial, las relacionadas con el deporte, rubro en el que Casa Ferro se dedicó por el auge del fútbol en Paraguay, y también porque Andrés Ferro Scala, hijo de Franccesco y Santina, fue socio fundador e integró el plantel de futbolistas del Club Guaraní.
Teatro. En otro espacio de la amplia casa, los directivos –que con un gran equipo humano trabajaron por más de un año en ambientar el centro cultural– montaron un teatro que puede albergar a ochenta personas, cómodamente sentadas, y con un escenario, donde ya se realizaron conciertos, como el de la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura, que se presentó durante el fin de semana de apertura de la casa, al igual que Francisco Russo. “La idea es tener espacio para la mayor cantidad de manifestaciones artísticas posibles”, explicaron sus impulsores.
Las paredes del teatro están totalmente revestidas con piedras del cerro Koi.
El centro posee además un amplio estacionamiento controlado para 50 vehículos, con el sistema de seguridad requerido.
En principio, la Casa Ferro abre los fines de semana, para deleite de las familias.
Sus directivos propiciarán variadas actividades culturales próximamente e invitan a artistas que desean utilizar el Centro Cultural, a ponerse en contacto con ellos, al teléfono (021) 670-877.
Los colegios que estén interesados en visitar Casa Ferro también pueden llamar por teléfono, para pautar una cita y una visita guiada, ya que el Centro Cultural cuenta con monitores capacitados para relatar la historia del lugar y de las obras expuestas.
