De esta manera se legitiman las sesiones fuertemente cuestionadas por los colorados disidentes, liberales efrainistas y algunos independientes.
En una de ellas habían cambiado la mesa directiva, quedando Pedro Alliana como titular en sustitución del diputado Hugo Velázquez, quien pasó a la disidencia luego de que Horacio Cartes designara a Santiago Peña como su sucesor por el movimiento Honor Colorado.
No solo se alió a Mario Abdo Benítez, sino que mediante un pacto ahora incluso conforma la chapa como candidato a vicepresidente por Colorado Añetete para las internas de diciembre.
Durante el tiempo que permaneció Velázquez como disidente al frente de Diputados las actas de las últimas sesiones no fueron aprobadas, pero luego del traspaso de mando administrativo, el cartismo vuelve a facilitar el acompañamiento a la línea oficialista de la Asociación Nacional Republicana (ANR).
En esa ocasión, Hugo Velázquez dijo que accedía a entregar el cargo para que la Cámara de Diputados siga funcionando sin perjudicar a la ciudadanía, pero advirtió que recurrirá a estrados judiciales porque considera ilegal la elección de la nueva mesa directiva.
Durante la extraordinaria de este martes, Clemente Barrios, diputado colorado por Paraguarí, pidió la aprobación de las cuatro actas presentadas a los legisladores. Indicó que no se violó la Constitución Nacional ni los reglamentos internos de la Cámara de Diputados.
Calificó de “amarga” a la disidencia que intenta volcar la opinión pública en contra de las sesión en que se designó a Alliana como nuevo titular.