Ljubetic explica que la senaduría vitalicia es un premio que otorga la Constitución Nacional a quien fue electo democráticamente y no fue destituido por juicio político.
Los senadores vitalicios tienen voz como tales, pero no integran el cuórum y no votan en el pleno.
Los ex presidentes Luis Ángel González Macchi y Federico Franco no accedieron al beneficio porque no fueron electos. Asumieron en el cargo por la renuncia y destitución de mandatarios. Este último caso se dio tras el juicio político a Fernando Lugo, ahora senador activo.
La discusión sobre la habilitación de presidentes para pujar por bancas en el Congreso surge nuevamente ante el fracaso de la reelección presidencial de Horacio Cartes y la búsqueda de un espacio de poder para cuando deje el cargo.
Al respecto, el ex asesor del Tribunal Superior de Justicia Electoral aclara que ninguna normativa dice que no se puede renunciar a la senaduría vitalicia o que sea incompatible con otros cargos.
Esto se explica en el caso de Nicanor Duarte Frutos, quien de acuerdo con el pronunciamiento de la Corte Suprema de Justicia estaba habilitado para ser legislador, pero fueron los congresistas quienes no tomaron su juramento e impidieron que ocupara una banca.
Tampoco hace falta que el mandatario renuncie seis meses antes de las elecciones generales. “Pero lo que sí es indefectible es que él deba renunciar a la presidencia antes del 1 de julio (de 2018), que es la fecha en que él va a jurar como senador, porque no puede ser senador y presidente al mismo tiempo”, detalló en comunicación con Radio Monumental.
El abogado electoralista argumenta que dentro de las inhabilidades para ser senador y diputado no se encuentran los presidentes y que “lo que no está prohibido está permitido”.
Incluso para las personas incluidas en las inhabilidades hay oportunidad para pelear por una banca en el Parlamento, solucionando tres meses antes de las elecciones su situación particular.
Por el momento, las figuras que buscan la presidencia de la República son Mario Abdo Benítez, por la disidencia colorada, y Santiago Peña, por el oficialismo. En tanto que aún no se confirma si Mario Ferreiro renunciará para ser una alternativa frente a la Asociación Nacional Republicana.