La sesión ordinaria de este jueves se venía desarrollando tranquilamente hasta que algunos legisladores comenzaron a cuestionar las declaraciones del senador encuentrista Eduardo Petta, sobre la función de las vicepresidencias en la mesa directiva.
El legislador declaró a un medio de comunicación que las vicepresidencias anteriores no dejaron un solo papel sobre la gestión realizada, incluso propuso eliminar esos cargos. Petta actualmente es vicepresidente segundo de la Cámara Alta.
Estas expresiones fueron criticadas por el senador liberal Julio César Franco quien recordó su gestión como vicepresidente durante el periodo presidido por su colega oviedista Jorge Oviedo Matto. Hizo lo mismo el colorado Enrique Bachetta.
Petta hizo uso de palabra para defenderse y se ratificó en su idea al argumentar que al llegar a la oficina de la vicepresidencia segunda no encontró señales sobre los trabajos realizados en periodos anteriores. Solo mencionó la presencia de seis platos de comida y volvió a cuestionar la presencia de estos cargos.
En un momento dado también reflotó los videos sexuales del senador Juan Carlos Galaverna y esto generó un alboroto en el plenario. Muchos de sus colegas lo abuchearon por mencionar ese hecho sin que sea el tema tratado.
El más ofuscado de todos fue el senador liberal Gómez Verlangieri, quien recordó el pasado como fiscal de Petta, y dijo que éste quiere “hacerse del agente dentro de la Cámara de Senadores”. Incluso sus críticas fueron subiendo de tono hasta llegar a lo personal.
Verlangieri fue vicepresidente primero en el anterior periodo y sostuvo que durante su gestión nunca pidió un plato de comida. Además comparó al encuentrista Petta con el calificativo de “pitufo gruñón”, uno de los personajes de la serie animada Los Pitufos.
Petta nuevamente se defendió sobre el calificativo de “fiscal del Senado” y recordó que 80.000 personas lo votaron a él por su perfil y pidió respetar eso. Mientras tanto, Verlangieri gritaba a su colega desde su lugar y lo señalaba con uno de sus dedos.
La senadora colorada Blanca Ovelar trató de bajar los decibeles de la discusión e instó a los senadores a ser “honorables tanto en el ámbito público como privado”. Por su parte, Desirée Masi dijo que cuando era diputada pensaba que el Senado era serio, desaprobando de esta manera la discusión.
Luego de una hora de debate, la sesión continuó normalmente con otros temas.
Contra Javier Zacarías Irún
También se generó un largo debate en torno al ambiente tenso que se vive por los trabajos de demolición de las casillas en Ciudad del Este.
El senador Nelson Aguinagalde arremetió contra el líder esteño Javier Zacarías Irún culpándolo de la situación de “casi enfrentamiento” entre ciudadanos de esa ciudad. Pidió emitir en el plenario el audio en que el político amenaza a un comisario.
La senadora liberal Zulma Gómez también cuestionó a Zacarías Irún al afirmar que las cosas públicas no pueden generar pertenencia.
La que defendió al líder esteño fue la colorada Mirta Gusinky, quien mencionó que a muchos le interesa hacer más una campaña de desprestigio antes que legislar.
El debate lo cerró Juan Carlos Galaverna al expresar que Javier Zacarías Irún actuó siempre “como propietario de Ciudad del Este” y que por eso “chantajea, extorsiona y roba”.