La policía atrapó a tres hombres que presuntamente son miembros de un grupo de ladrones de motocicletas que se dedican además a la reducción y venta de sus partes. Entre los sospechosos está un padre de familia y su propio hijo. Uno de ellos tiene antecedentes por perpetrar un hecho delictivo similar.
Pese a que se halló una motocicleta robada en poder de los mismos, fueron imputados por reducción y beneficiados con prisión domiciliaria.
Taurino Gómez (45), el hijo de este, Leonardo Favio Gómez Gómez (20), y Cristian Javier Céspedes (27), fueron aprehendidos por la policía luego de una pesquisa que se inició tras la denuncia de un robo de motocicleta en las inmediaciones de la laguna de la ciudad de Itá, el pasado domingo. La víctima, Salvador Duarte Guanes (25), reportó que había dejado estacionada su motocicleta y que luego desapareció. Un testigo brindó detalles del hurto y dio pistas a la Policía, refieren desde la Comisaría 12ª de Itá.
Cuando los agentes acudieron a la vivienda, ubicada en el barrio Fátima de la Ciudad del Cántaro y la Miel, descubrieron a Taurino Gomez y Céspedes desarmando el biciclo. Inmediatamente fueron aprehendidos Taurino y Cristian.
Tras la pesquisa, confirmaron que Leonardo se encargaba de hurtar la motocicleta, luego la llevaba a su casa para que su padre, quien cuenta con antecedentes por robo de motos, se encargue –presuntamente– de reducir el móvil. Tras obtener estos datos, los agentes aprehendieron al joven.
Cristian Javier Céspedes, quien sería cuñado de Leonardo Favio, también realizaba el desarme, según el comisario Vidal Jara, jefe de la Comisaría 12ª Central.
El agente policial comentó que los sindicados desarmaban los biciclos y ponían sus partes a la venta; luego se deshacían de los chasis de las motos. Los agentes sospechan que la casa de Gómez era utilizada como un desarmadero de las motos.
IMPUTADOS. El fiscal Humberto Houdín imputó por reducción a los hombres y solicitó prisión domiciliaria para ambos, lo que causó el enojo de los uniformados, ya que la motocicleta fue denunciada como robada y posteriormente reducida por los ahora detenidos.
El fiscal comentó que la flagrancia del delito se produjo en cuanto a la reducción y no así el robo. Además, hubo un arreglo entre las partes y los implicados resarcirán el daño a la víctima, entregándole dinero y otra nueva motocicleta, explicó, pero dejó en claro que seguirá la pesquisa.
Houdín dijo que aún no tienen datos de quién robó la motocicleta y espera que la Policía entregue más elementos que deben ser tomados como pruebas sobre el caso.