Tres agentes policiales de la jefatura de policía de Cordillera fueron aprehendidos al estar implicados en el asalto violento perpetrado el 28 de diciembre del 2014 en Ypacaraí, en perjuicio del propietario del balneario Pinamar. Esa ocasión, un ex convicto murió tras una balacera de película y luego de una pesquisa fue detenido un supuesto asaltacajero implicado en ese violento atraco.
Los agentes de la sección de Robo y Hurtos de Investigación de Delitos lograron detener al oficial primero Julio Américo Franco, suboficial Inspector Blas Ramón Ramírez Álvarez y el suboficial segundo Antonio Sosa Alemán, comunicaron los comisarios Tomás Paredes Palma, jefe de la unidad y Elisa Ledesma de Relaciones Públicas de la Policía Nacional.
Los datos policiales señalan que en la mañana del 28 de diciembre, los uniformados cerca de las 11.00 ingresaron al balneario junto con José María Cubilla Acosta, quien murió tras el asalto al recibir un disparo en la cabeza de parte de sus cómplices. Los mismos llegaron al sitio a bordo de una patrullera, con el delincuente a bordo. Solicitaron hablar con Atilio Alé Cabrera, propietario del sitio turístico. Finalmente no lo hicieron, pero rastrearon el movimiento de la víctima. Así aseguraron testigos que identificaron al fallecido.
El empresario, cerca de las 21.30, aborda su vehículo Mitsubishi Triton, color azul, en compañía de su hijo Alfredo Karim Alé y la novia de este último, Tania Acosta. Se dirigieron hasta Ypacaraí y en la zona del barrio Cerro Guy, donde se produjo el asalto.
De otra camioneta desciende Cubilla y otros 4 cómplices quienes balearon el rodado de la víctima e hirieron al joven y a su novia. Los cómplices se llevaron una fuerte suma de dinero que osciló la suma de 100 millones de guaraníes, producto de la recaudación del local. El ex convicto tomó una camioneta y a unos metros volcó. Allí fue ultimado de un balazo en la cabeza por sus cómplices quienes huyeron del sitio abandonando armas de fuego, chalecos de la Policía y celulares que la Policía rastreó y llegó hasta los uniformados hoy detenidos.
Una fuente de la investigación reveló que un agente que custodiaba el balneario recibió la propuesta de asestar un golpe en perjuicio del empresario, pero no aceptó.
La Policía ya identificó a tres miembros de la peligrosa banda que asestó el golpe planificado por los agentes.