Con el lema “Los jóvenes llamados a renovar la iglesia, preciada herencia de nuestro Señor Jesucristo”, el cuarto día de la novena en Honor a la Virgen de los Milagros de Caacupé tuvo como orador a monseñor Ángel Cabello Almada, obispo de la diócesis de Concepción y Amambay.
Inició la homilía pidiendo por la liberación de las personas secuestradas en el país y por las almas de los fallecidos en el accidente de Antioquía. Además, centró la reflexión en el protagonismo que los jóvenes deben tener en la Iglesia.
Monseñor habló acerca de cómo mantener a una familia firme: “nuestras familias solo estarán firmes si están unidas, necesitamos afirmar nuestra casa, nuestra persona, nuestra familia para enfrentar estos desafíos”
En cuanto a los males que acechan a la sociedad, dijo que si bien a veces los jóvenes están vulnerables, no deben redoblarse: “a veces desesperados, los jóvenes buscan refugio en lugares equivocados como la droga, el suicidio, la delincuencia, hay que luchar, reaccionen con valentía ante las cosas que le agreden”.
Además, entre las cosas que son herramientas pero a la vez su uso puede cambiar las cosas dijo que “hay que saber usar el internet, ya que a veces herramientas útiles no sabemos usar”.
En cuanto a la situación política refirió: “todos estamos cansados de las promesas incumplidas de nuestros políticos, pero no por eso debemos sentarnos a esperar”.
Igualmente, invitó a los jóvenes a renovar la Iglesia, a ser útiles para la sociedad. “Los jóvenes están llamados a actuar de forma protagónica, tenemos que hacer algo para atraer de nuevo a los jóvenes a la iglesia, hay que dar a los jóvenes la oportunidad de trabajar”, refirió.
No olvido a los fallecidos del accidente en donde iba el equipo de Chapecoense, ya que al inicio de la homilía, daba algunas palabras para el descanso eterno de las almas y recuperación para los sobrevivientes.