El banco de desarrollo holandés FMO adquirió la totalidad de los títulos, a una tasa de interés de 7,95% anual, teniendo en cuenta que el porcentaje quedó fijado en Líbor (tasa referencial a nivel internacional) de seis meses (0,4468%) más 7,50%.
Con esta segunda colocación, Sudameris cierra su programa de emisión global, que había sido autorizada por 20 millones de dólares. La primera mitad del dinero había sido colocada a finales del año 2013.
El objetivo de esta emisión es contar con más recursos y mayor capacidad para crecer en la base actual de clientes del banco, además de llegar a nuevos segmentos.
El vicepresidente del Banco Sudameris, Gustavo Cartes, apuntó que buscan financiar a mayor plazo a diversos sectores en los que ya están posicionados, como el corporativo, industrial, como es el caso de frigoríficos, cuyas inversiones requieren de mayor extensión de tiempo, indicó.
Comentó, además, que la retención de utilidades será otra manera de contar con fondos para satisfacer esta demanda crediticia.
Los bonos subordinados son títulos emitidos por entidades financieras, que podrían convertirse en acciones (en los casos previstos en la ley), a un plazo mínimo de cuatro años. Estos son actualmente los más escogidos por las entidades para operar en Bolsa.
Otro de los bonos que pueden ser subastados por bancos y financieras son los denominados bonos financieros, similares a los bonos emitidos por empresas comerciales, pero con la diferencia de que el corte mínimo en estos casos no es de G. 1.000.000 o USD 1.000, sino que llega a 300 salarios mínimos (G. 547.216.000) y en dólares de USD 125.000.
No obstante, ambos tipos de bonos pueden ser negociados en el mercado secundario (recompra y reventa de títulos), y pueden ser utilizados para operaciones de Reporto (capacidad de acceder a efectivo ofreciendo como garantía un título con el compromiso de recuperarlo a través de la Bolsa).
En el caso de los bonos financieros, pueden ser renegociados por cortes inferiores en el mercado secundario, con lo que la disponibilidad de liquidez (cambiar el título por efectivo) podría ser parcial; por ejemplo, con cortes de USD 25.000 dentro de los 125.000 de cada bono.
Otra de las diferencias es el plazo; mientras que los bonos subordinados pueden convertirse en acciones y tienen un plazo mínimo de cuatro años, los bonos financieros no tienen posibilidad de conversión y tienen un plazo mínimo de emisión de un año y medio.