El ministro boliviano de Obras Públicas, Milton Claros, encabezó la cita con la participación de representantes de Paraguay, Perú y de los organismos financieros Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco de Desarrollo de América Latina CAF.
Claros dijo a los medios que se trata de una primera reunión técnica, tras haber firmado antes los Gobiernos de los tres países memorandos para impulsar políticamente el ferrocarril proyectado.
Se trata de un plan para unir el puerto brasileño de Santos con la terminal peruana de Ilo con un ferrocarril que tendría una longitud de 3.755 kilómetros, permitiendo la conexión del centro de Suramérica y facilitando las exportaciones hacia el Asia.
El presidente boliviano, Evo Morales, impulsa el proyecto con la convicción de que se tratará del Canal del Panamá del siglo XXI.
El mandatario tiene previsto reunirse con las delegaciones internacionales en el Palacio de Gobierno, incluida la de empresarios de Alemania, Francia y Suiza que están interesados en el corredor ferroviario interoceánico.
Claros destacó que la iniciativa busca una mayor integración suramericana, pero también estimular el comercio y los negocios, con la posibilidad de que sus beneficios alcancen a Argentina y Uruguay, si la vía férrea se conecta con la hidrovía Paraguay-Paraná.
Alentó la esperanza de que los Gobiernos de Brasil y Uruguay se involucren en el proyecto ferroviario y consideró que de todos modos hay una alternativa para el trazo de la vía, aprovechando el interés de Paraguay en construir un ramal desde Bolivia hacia su territorio.
Explicó que Paraguay tiene una “propuesta interesante” para hacer una conexión desde el pueblo boliviano de Roboré hasta la zona denominada Capitán Carmelo Peralta, para ir hacia la hidrovía, que se conecta con el Atlántico.
Bolivia y Paraguay, que no tienen salida directa al mar, son los principales motores del proyecto, que cuenta con el apoyo del vicepresidente peruano, Martín Vizcarra, que hoy, sin embargo, desistió de llegar a La Paz debido a los graves problemas provocados por las inundaciones en Perú, explicaron autoridades bolivianas.
A la cita asisten el viceministro de Obras Públicas de Paraguay, Agustín Encina, y el jefe de gabinete de Vizcarra, Carlos Estremadoyro, entre otros representantes de esas delegaciones.
Para este martes también se espera la presencia de los gobernadores de los estados brasileños Mato Grosso y Mato Grosso del Sur, que son fronterizos con Bolivia, y autoridades del Viceministerio de Transportes e Infraestructura Digital de Alemania.
La Cámara de Industria y Comercio Bolivia-Alemana comunicó hoy que treinta empresas alemanas de los sectores de transporte, logística y construcción buscarán este miércoles establecer contactos con compañías bolivianas para una rueda de negocios vinculada al tren bioceánico.
Por su magnitud, la obra puede demandar una inversión de unos 10.000 millones de dólares, igual a poco menos que un tercio del producto interior bruto de Bolivia, calculado en 34.000 millones de dólares.
