Por Édgar Medina
SANTA LUCÍA - ITAKYRY
Unos 500 labriegos bloquearon todos los accesos de la colonia Santa Lucía, distrito de Itakyry, por tiempo indefinido, para reclamar que el Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) entregue las parcelas para la producción de renta, pendiente desde hace siete meses.
El titular de la oficina regional del Indert, Jorge Vázquez, con un pequeño grupo de funcionarios, ya no podrán salir hasta que terminen la demarcación y entreguen las parcelas, al igual que algunos vendedores que se vieron sorprendidos por la medida de fuerza. Funcionarios de la Décima Región Sanitaria que repartían medicamentos en las comunidades indígenas también quedaron atrapados en el cerco, así como algunos vendedores de alimentos.
Los campesinos liderados por Juan Noguera, de la comisión vecinal Santa Lucía, fueron trasladados desde la localidad de Ñacunday, donde estuvieron asentados en una propiedad a orillas del río Ñacunday, desde el año 2011, a la colonia Santa Lucía como parte de un proceso de recuperación de tierras del Estado.
Son más de 550 familias reubicadas, quienes accedieron a una hectárea cada una y a una vivienda de la Senavitat, que todavía se están construyendo, pero quedó pendiente la promesa de recibir 10 hectáreas por familia para el cultivo extensivo, por parte del propio presidente de la República, Horacio Cartes.
MUY LENTO. Noguera afirmó ayer que el día de la inauguración el Gobierno prometió repartir las parcelas en 20 días, pero transcurrieron 7 meses y los funcionarios del Indert solo van de uno a dos días por semana a trabajar en la zona, sin llevar adelante el fraccionamiento.
Ayer acudió al sitio el propio titular de la oficina regional del Indert con una orden de trabajo de tres días, desde el jueves hasta el sábado.
Llegaron al mediodía y comenzaron a fraccionar recién alrededor de las 15.00, por lo que los vecinos ya no se sintieron conformes e iniciaron la medida de fuerza.