Además, instó al Congreso a no incrementar los gastos corrientes ni el salario de los estatales, durante el estudio del proyecto de Presupuesto 2017.
Al cierre de agosto de este año, el saldo de la deuda pública fue de USD 6.115 millones, lo cual representa el 22,5% del PIB. Esto representa 46,4% más de lo registrado al cierre del año 2013, cuando Horacio Cartes asumió la presidencia del país.
De acuerdo con los detalles que brindó Barreto, primero deberían moderarse las modificaciones que se hagan a los gastos que están presupuestados, tratar de mantener los topes y especialmente no tocar los gastos corrientes y los salarios, que son una parte importante de la responsabilidad del Congreso.
A ello sumó el hecho de que el Parlamento debería limitar el déficit fiscal y la emisión de deuda a la meta de 1,5% del PIB, que está previsto en la Ley de Responsabilidad Fiscal; y que los legisladores deberían derogar la Ley 5074/13, porque es una norma que autoriza el endeudamiento sin que pasen por el Congreso los contratos de obras con llave en mano y con financiamiento. “Lo que hay hoy en el Presupuesto es un déficit con una emisión de bonos que está cercano al 1,5%, pero aparte de eso está la ejecución de estos proyectos (bajo la Ley 5074/13) que elevan el déficit de manera muy significativa y que no observan allí (en el proyecto de Presupuesto 2017)”, expresó.
IRREAL. Agregó que según las proyecciones que tiene, el déficit fiscal del presente ejercicio fiscal cerrará con un saldo negativo del 2% del PIB, y que el próximo año cerrará por encima del 2%.
Indicó que el proyecto de Presupuesto que se envía al Congreso tiene un componente muy grande de “otros ingresos”, por alrededor de USD 1.000 millones, lo que calificó de irreal porque no se cumple nunca. Añadió que el déficit fiscal real es el que se observa en la ejecución presupuestaria. “El año pasado terminó por encima del 1,5%, este año va a terminar de vuelta arriba y por lo que estoy viendo el año que viene de vuelta va a estar por encima, y es creciente además”, afirmó.
Agregó que en el plan de gastos estatales del año próximo no se observa dónde está incluido el proyecto de la ruta Transchaco, por ejemplo. Indicó que si bien desde su punto de vista no es así, el Ministerio de Hacienda considera que hay una autorización previa por parte del Congreso a adjudicar los contratos realizados bajo la Ley 5074. Otro punto en el cual Barreto discrepa es que cuando dentro de dos o tres años se vayan recibiendo los distintos certificados de obras van a impactar en el presupuesto, pero considera que ya forma parte de la deuda pública desde el momento que se adjudica el contrato.