Un grupo del Bañado Norte saldrá de la zona del Botánico y otro de 21 Proyectada y Antequera, para encontrarse finalmente ante la sede ministerial.
María García, dirigente de los bañadenses, explicó que la primera parte ya significó una exclusión de gente de la Chacarita, estimada en 4.000 familias y que con la otra parte se sumarán otras 3.000, quienes necesariamente deberán dejar sus casas en la ribera.
“Esto hace que las 1.000 viviendas que se buscan construir en el RC 4, en Loma Pytá, no van a dar respuesta a todos los que fueron sacados de sus hogares”, resaltó.
La misma recordó que hicieron una contrapartida a las autoridades de la cartera de Obras Públicas para encarar una franja costera, que además de ser mucho más barata, no expulsará a ningún poblador de las costas del río.