Bajac ratificó su postura durante un conversatorio sobre seguridad regional en el Club Concepción, donde estuvieron miembros de la Fuerza de Tarea Conjunta, intendentes municipales y también familiares de secuestrados, según reportes del corresponsal Justiniano Riveros.
El ministro manifestó su preocupación por la situación de zozobra que se vive en esta región del país, remarcando el hecho de que ya pasaron más de doce años y la suma de muertos alcanza a los 33, sin mencionar a los tres actuales secuestrados por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Aseguró que en ningún momento habló de negociación, “porque nadie puede negociar con quienes tienen problemas con la justicia”, pero dijo sin embargo que “la justicia quiere llegar” al grupo armado, “y que entiendan los señores de allá que no queremos violencia”.
Consideró que la actual política contra el EPP no ofrece resultados y que la ciudad necesita de trabajo. “Tenemos que buscar alguna solución, decir que se puede y que no solo estamos para matar, sino para llevar la paz a estos lugares”, refirió.
Explicó, como ya lo hizo el mes pasado, que su propuesta de diálogo tiene como objetivo ofrecer una resolución para los crímenes de los miembros de la agrupación. “Es cierto que hay quienes deben algunas cosas a la sociedad, por eso queremos que ellos se presenten para poder definir sus causas ante la justicia”, concluyó.
Sobre su última visita a la localidad de Arroyito, indicó que recordó su infancia alejada del ambiente afectado por la inseguridad en la zona. Dijo además sentirse apenado por este conflicto que no permite progresar a los jóvenes, a quienes considera que tienen “poco futuro” en estas condiciones.