Con 700 pasajeros a bordo, el barco Adonia de Fathom, filial de la empresa estadounidense Carnival, ingresó en el puerto de La Habana tras haber partido de Miami la tarde del domingo. El sonido de la bocina arrancó gritos de emoción entre los cubanos que seguían desde el malecón la lenta entrada del crucero en este día feriado y soleado en Cuba. A Yaney Cajigal, una bailarina de 32 años, la alegría casi ni le permitía hablar. Entre el reducido grupo de cubanos que viajó desde Miami, el enclave de la diáspora de Cuba en EEUU, está su sobrina. “Esto para mí es increíble, esto es muy emocionante.
Los recibimos con las banderas de Cuba y Estados Unidos para que todo sea unión, paz y tranquilidad”, dijo la mujer. El viaje de este primer crucero que cubre la ruta entre EEUU y Cuba añade un nuevo símbolo a la reconciliación política entre los otrora enemigos de la Guerra Fría. Aun cuando se mantiene en vigor el embargo estadounidense sobre la isla impuesto en 1962, los dos países restablecieron relaciones diplomáticas en 2015. AFP