En esta zona las cooperativas Volendam y Friesland, ambas asociadas a la Fecoprod, se desempeñaron como entidades de cabecera para el apoyo a pequeñas cooperativas del lugar.
Autoridades, tanto de la Fecoprod como la Incoop, indicaron que la segunda etapa se está llevando adelante en Alto Paraná e Itapúa, donde partir del mes de junio del año pasado ya iniciaron los primeros trabajos en forma conjunta, que beneficiaron a unas 1.200 familias de pequeños productores cooperativizados de la zona. Cabe mencionar que el plan clúster consiste en la asistencia técnica de productores de las grandes cooperativas para la inserción de pequeños productores en rubros de renta como el sésamo, chía, yerba mate, soja y otros rubros como la piscicultura y la venta de productos frutihortícolas a través de ferias regionales.
La cooperación de la JICA fue, hasta el momento, de USD 1 millón, que fueron utilizados en cuatro años de asistencia en San Pedro. Se espera la renovación financiera para la segunda etapa del plan.