Édgar Medina
CIUDAD DEL ESTE
En una actitud criminal e irracional asesinaron a balazos a un menor de edad en un caso de violencia doméstica, cuando dos hermanos acudieron en defensa de la mujer —joven madre— que era golpeada por el agresor, en la noche del miércoles. Ocurrió en el barrio Remansito de Ciudad del Este y los autores se encuentran prófugos. Aun así enviaron amenazas vía redes sociales a las víctimas.
La Policía busca como autores a Rubén Darío Gamarra (38) y a su hijo Francisco Javier Gamarra Notario (19), quienes son sindicados de participar en el crimen que segó la vida de Willian Daniel Navarro Silva (16) y que dejó con heridas a su hermano Gregorio Navarro Silva (18).
El horrendo episodio se registró en una vivienda del sector 4 de Remansito, donde reside la familia de Martiniano Navarro, entre ellos Liliana Navarro Silva, madre del hijo de Francisco Javier Gamarra. La mujer había abandonado al hombre porque era sometida sistemáticamente a golpizas y volvió a la casa de sus padres, según los antecedentes. Hasta allí llegó el miércoles Francisco Javier en una de sus visitas a su hijo, pero insistió a su ex pareja que volviera con él; ante la negativa, la sometió a una brutal golpiza, según los familiares.
Los demás miembros de la familia, en ese momento, se encontraban en la iglesia. Luego llegó el menor y un poco más tarde Gregorio, quienes redujeron al cuñado y lograron sacarlo de la casa; este se alejó lanzando amenazas, según los testigos. Sin embargo, un poco más tarde Francisco Javier regresó y retó a duelo a sus ex cuñados. Estos, al salir a la calle, ya fueron recibidos a tiros por el padre del agresor, quien se encontraba a pocos metros de la casa acechando a sus víctimas, siempre según el relato de los familiares.
ANTECEDENTES. El comisario principal Bernardo Ojeda confirmó que Liliana Navarro Silva hace unos seis meses había denunciado por violencia doméstica a su ex pareja. Esa fue la causa por la que había vuelto a la casa de sus padres, aunque Francisco Javier Gamarra Notario podía visitar a su hijo menor en la vivienda donde el miércoles ocurrió el crimen. Sin embargo, hasta ayer no pudieron confirmar si la Justicia inició algún proceso para investigar el hecho.
Los agentes policiales confirmaron que tanto Francisco Javier como su padre Rubén Darío Gamarra cruzaron el río Paraná y se refugiaron en alguna favela del Brasil, en la misma noche en que cometieron el crimen. Ambos se dedicaban a la recolección de objetos reciclables y se presume que serían adictos a estupefacientes, de acuerdo con el testimonio de algunos vecinos. Tanto el padre como el hijo habrían utilizado revólver para atacar la vivienda de las víctimas, quienes no poseían arma de fuego, atendiendo que los uniformados no hallaron evidencias en la escena del crimen, conforme con la versión del comisario Ojeda.