Por Darío Arámbulo
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La falta de celeridad de parte de los magistrados del Poder Judicial para que ordenen la incineración de drogas incautadas en los procedimientos hace que se acumulen los cargamentos. Dos sedes antidrogas de la Policía Nacional tienen acumulados 10.000 kilos de marihuana, incluso parte de ello corresponde a incautaciones del año 2010.
Luego del robo de 252 kilos de cocaína de la Jefatura de Policía de Amambay, en el que están implicados y procesados agentes policiales y políticos de la zona, los policías esperan que las toneladas de cargamentos de drogas que tienen en sus bases sean ya incineradas, claro, una vez que la Justicia dé la orden para su cometido.
Cinco mil kilos de marihuana están guardados en Lambaré, donde está ubicada la sede central de Antinarcóticos. En la regional de Ciudad del Este tienen la misma cantidad. Las fuentes explicaron que solo en estas dos sedes de Antinarcóticos se guardan evidencias.
En tanto que los cargamentos de cocaína que son incautados se trasladan hasta la sede de la Unidad de Inteligencia Sensible (SIU) de la Policía Nacional, cuyos efectivos trabajan en conjunto con los de Antinarcóticos.
El pasado lunes, varios jueces ordenaron la incineración de cargamentos de cocaína incautados en seis procedimientos, tanto de la Policía como de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), alcanzando un total de 1.628 kilos de cocaína. Esta medida se produjo como reacción ante el robo de evidencias de la Jefatura de Policía de Amambay.
Incluso, con el correr de los años las distintas evidencias son carcomidas por la humedad, las alimañas, y se han mezclado los cargamentos de drogas, además de perder la pureza y el peso, afectando de esta manera los resultados del anticipo jurisdiccional de prueba.
VIEJO. La administración central del Departamento Antinarcóticos de la Policía Nacional se mudó de sede en el año 2011. Anteriormente tenía una base en el barrio Sajonia, de Asunción, y ahora se encuentra en Lambaré. En la mudanza tuvieron que llevar evidencias incautadas un año antes y que hasta ahora no fueron incineradas, indicaron uniformados policiales.
Además de la droga, también quedan guardadas prensas, reactores químicos, balanzas, que por el tiempo quedaron oxidadas y en el futuro pueden incidir en los procesos penales correspondientes.
AL AIRE. En Lambaré, Antinarcóticos tiene cerca de 5.000 kilogramos de droga acumulada. Todo se guarda en una habitación, que tienen pilas de marihuana prensada que llegan hasta el techo. La misma situación se produce en la sede Regional de Ciudad del Este, donde alcanzan la misma cantidad de kilos las evidencias guardadas.
Incluso, a falta de lugar para el resguardo, un cargamento que se incautó de un camión el 8 de febrero del 2014, en la localidad de Guarambaré, sigue estando oculto dentro del vehículo. Se trata de una carga de 2.861 kilogramos, caso en el que el fiscal interviniente es el agente fiscal Marcelo Pecci.
Tanto policías como fiscales esperan que los jueces encargados de ordenar la destrucción de las drogas cumplan con lo establecido en la ley, puesto que en las sedes policiales ya no hay lugar para resguardar más cargamentos.