EFE
“La organización espera una investigación rápida e independiente de las dos muertes, considerando que hay sospecha de que fueron cometidas por policías militares”, afirmó un comunicado del organismo.
La ONG se refirió a la muerte del bailarín Douglas Rafael da Silva Pereira, cuyo cadáver fue encontrado con un tiro en una escuela de la favela Pavão-Pavãzinho el pasado martes, y a Edilson Silva dos Santos, que murió con un disparo en la cara durante las protestas que se produjeron ese día en esa barriada pobre.
La muerte de Pereira generó disturbios la noche del martes y este jueves causó nuevas protestas de los habitantes de la favela, que pararon el tráfico de vehículos en Copacabana a la vuelta del entierro del bailarín.
Además de la investigación, Amnistía demandó que las autoridades brasileñas reconozcan la “necesidad urgente de cambios estructurales” en los cuerpos de policía, que incluyan un aumento de transparencia y la implementación de un control externo de sus actividades.
El organismo señaló que la policía brasileña “está entre las que más matan en el mundo, según datos de la ONU” y contabilizó 10.134 muertes en intervenciones policiales en Río de Janeiro entre 2002 y 2011
