Karlov fue asesinado en Ankara por un policía de 22 años vestido de civil cuando se encontraba en un atril inaugurando una exposición fotográfica, con gritos a favor de la ciudad siria de Alepo.
“Está claro que condenamos el ataque contra el embajador ruso en Turquía. No puede haber justificación a un ataque contra un diplomático”, dijo Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
También desde la ONU, los quince miembros del Consejo de Seguridad en un comunicado trasladaron sus condolencias a la familia de la víctima y al Gobierno ruso, a la vez que reiteraron la necesidad de llevar ante la Justicia a los responsables y quienes financian este tipo de acciones y reafirmaron que el terrorismo es una de las mayores amenazas a la paz y seguridad internacional.
EE.UU. se pronunció a través de su portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, quien en su cuenta de Twitter dijo: “Condenamos este acto de violencia, independientemente de su origen. Nuestros pensamientos y rezos están con las víctimas y sus familiares”.
Por su parte, el presidente electo de EE.UU., Donald Trump, dijo a través de un comunicado que “El asesinato de un embajador es una violación a todas las reglas del orden civilizado y debe ser condenado mundialmente”.
Desde centroamérica, Guatemala, Honduras, Panamá y Nicaragua también expresaron su dolor y condenaron el asesinato del diplomático.
“Una vez más condenamos enfáticamente esta conducta destructiva, irracional, que ciega vidas, promoviendo el terror y alterando completamente el derecho a la seguridad”, expresó el mandatario nicaragüense, Daniel Ortega.
La cancillería panameña expresó su solidaridad con la familia de Karlov e hizo un llamado a “la búsqueda de una solución pacífica y duradera al conflicto en esa región”.
El secretario de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper escribió en su cuenta de Twitter que el asesinato de Karlov “enluta a la diplomacia mundial” y expresó su “solidaridad con el Gobierno de Rusia por la lamentable muerte”.
A esta condena se unió la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México que dijo confiar en que “se tomarán todas las medidas necesarias para esclarecer este crimen en contra de un diplomático extranjero”, con el objetivo de que “los responsables sean llevados a la justicia”.
El Gobierno venezolano en medio de sus condolencias hizo un llamado “a Occidente” para que “cesen las campañas de odio y de falsarias contra la hermana Nación rusa” y señaló que “rechaza el terrorismo en todas sus expresiones, y hace votos por prevenir las causas de este fenómeno que somete a pueblos enteros al miedo y la violencia”.
La cancillería colombiana María Ángela Holguín, expresó su solidaridad y su pesar porque Turquía “ha sido víctima de terrorismo en los últimos tiempos” y agregó que “el mundo está llegando también a unas situaciones en que no hay ninguna parte segura, donde en cualquier parte puede pasar cualquier cosa”.
El Gobierno de Uruguay indicó que “reitera su repudio ante cualquier forma de violencia, cualesquiera sean sus motivaciones, no reconociendo justificativo político, religioso o de ninguna especie que legitime estos actos”.
Paraguay señaló que “reitera una vez más su rechazo a estos actos criminales” al tiempo que mantiene su compromiso internacional para “erradicar toda forma de violencia e intolerancia”.
El Ejecutivo argentino de Mauricio Macri hizo llegar sus condolencias a los familiares del embajador y su solidaridad con el Gobierno ruso y dijo reafirmar “su voluntad de profundizar la lucha contra el terrorismo y de asegurar la paz y la seguridad internacionales, en el marco del derecho internacional y del respeto a los derechos humanos”.
Así mismo, la presidenta chilena Michelle Bachelet reiteró su firme rechazo al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.
El atentado de hoy se produce en víspera de un encuentro tripartito que reunirá a los ministros de Exteriores de Rusia, Turquía e Irán en Moscú para tratar de encontrar una salida a la situación en Alepo, en el norte de Siria, y acercar posturas para futuras negociaciones de paz.
Rusia y Turquía acordaron una comisión conjunta de investigación para esclarecer el ataque, al tiempo que se aumentarán las medidas de seguridad en las delegaciones rusas en el país eurasiático.
