“Lo que ocurrió ese día fue planificado, programado. Los agentes llegaron de manera coordinada y directamente fueron a buscar a Efraín Alegre. Dos convoy llenos de agentes atropellaron la sede del PLRA y ya empezaron a disparar balas de plomo, directamente contra la presidencia. Rodrigo Quintana no era la víctima que se buscaba”, mencionó Duarte.
Ante esta situación, el abogado de Alegre solicitó a la propia Fiscalía general unificar las causas, por lo que se hizo una ampliación de los hechos con varias grabaciones en las que se escucha a algunos agentes que el plan era acabar con la vida del presidente del partido.
“Nosotros ampliamos la denuncia que ya cuenta la fiscala Raquel Fernández, quien investiga la muerte del joven dirigente liberal”, mencionó el abogado.
Duarte acompañó a Efraín Alegre al despacho de Javier Díaz Verón para pedir la unificación de las causas.