Según manifestó Álvarez, en estos momentos Latinoamérica no tiene incidencia en el resto del mundo como actor político, económico y social y por ello debe ir hacia una integración.
“Hace 50 años que discutimos como dejar de vender materias primas al mundo, no lo pudimos resolver con estrategias nacionales, entonces tenemos que probar si mejorando los niveles de integración mejoramos nuestro sistema productivo buscando complementariedades económicas y productivas en la región”, manifestó Álvarez.
Los dichos del secretario general se dieron en el marco del conversatorio titulado “Responder proponiendo, bases para un Acuerdo Económico Comercial Integral Latinoamericano”, que organizó hoy en la sede de Aladi, en Montevideo.
Álvarez dio inicio a los trabajos ideados por la Aladi, junto con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca) y el Bando Interamericano de Desarrollo-Instituto para la Integración de América Latina y el Caribe (BID-Intal) para presentar un estudio técnico a los países de la región para un Acuerdo Económico Comercial Integral Latinoamericano.
Del evento participaron diversas autoridades latinoamericanas para discutir las bases de ese acuerdo comercial integral en la región que propuso la Aladi.
En este sentido, Álvarez consideró que es necesario dejar de defender el territorio de cada Estado y avanzar “con total honestidad” para consolidarse ya que existe una “coyuntura dramática” a nivel internacional desde el punto de vista geopolítico, económico y social.
Asimismo, el secretario general expresó que entiende las dificultades que Latinoamérica tiene para alcanzar un acuerdo económico de este tipo debido a “las asimetrías, la heterogeneidad y las diferencias” que existen entre los países.
Sin embargo, no dudó en afirmar que esta integración será un insumo “muy importante” para mejorar la matriz productiva de los países.
Del evento también participó el canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, quien subrayó que es “muy oportuno” tener este tipo de discusiones dadas las condiciones globales de la actualidad y que desde su cartera comparten el objetivo de llegar a un acuerdo económico comercial integral.
Además, destacó la importancia de generar un tratado “de nueva generación” que permita, entre otras cosas, fortalecer el mercado y comercio interregional y potenciar las complementariedades productivas.
Sobre este punto Nin Novoa manifestó que su concreción requiere “voluntad política” que abarque una mirada “de largo plazo” con grado de “estabilidad, madurez y consenso” por parte de cada país.
En tanto, el canciller señaló que si se concretaran los avances en los acuerdos entre los organismos subregionales como el Mercosur y la Alianza del Pacífico, el salto hacia adelante sería “de gran significación”.
Al respecto dijo que el Gobierno uruguayo está “muy entusiasmado” con la aproximación entre los dos bloques ya que generaría oportunidades “absolutamente cruciales” para Uruguay.
“Es un hito importante en la integración latinoamericana, dos procesos regionales importantes suman sus esfuerzos en una gran macroregión y lo hacen en un momento en que prevalece una gran incertidumbre a nivel internacional y se observan expresiones proteccionistas y nacionalistas y cuando no xenófobas”, añadió.