En una charla con medios locales, Aguayo explicó el terrible momento que está pasando en tierras incas. “Nosotros (con su familia) estamos esperando que me puedan pagar. La vez pasada tuve problemas con el departamento donde estamos viviendo y tengo tiempo hasta la otra semana para poder pagar, pero hasta ahora no sé qué hacer”.
muy duro. A renglón seguido, el defensor compatriota dejó ver cuán mal lo está pasando: “Mi familia ya está pasando hambre. Estoy con dos hijos y mi señora. Es difícil estar fuera de tu país. Yo puedo y aguanté muchas cosas, pero cuando las criaturas pasan hambre ellos no saben decirte no. No tengo ni un sol para irme a mi país. Ojalá la gente de Chimbote pueda darme una mano”, sentenció.
Después de conocerse esta situación Mario Villasanti, arquero de Inti Gas, movió a los Agremiados del Perú para ayudar a Gregor Aguayo.