“Es muy difícil identificar e incluso localizar a los autores del ataque. Llevamos a cabo un combate complicado frente a grupos de cibercriminalidad cada vez más sofisticados que recurren al encriptado para disimular su actividad. La amenaza es creciente”, subrayó Rob Wainwright.
El virus usado en el ciberataque bloquea los documentos de los usuarios y los hackers exigen a sus víctimas pagar una suma de dinero en la moneda electrónica bitcoin (difícil de rastrear) para permitirles acceder nuevamente a los archivos.
Según Rob Wainwright, director de Europol “ha habido muy pocos pagos hasta ahora”, pero no dio cifras. Según Symantec, el sábado a mediodía se habían registrado 81 transacciones por un valor total de USD 28.600. Posteriormente, la empresa de seguridad informática Digital Shadows señaló este domingo que los pagos con bitcoin alcanzaban a USD 32.000.
Por su parte, el departamento de Seguridad interior estadounidense advirtió que “pagar el rescate no garantiza la restitución de los documentos”. afp