El evento se extiende hasta la semana que viene y participan más de 100 jóvenes, con sus familiares.
Según explicó el titular de Adipar, Cecilio Barrios, con esto se pretende que estas personas puedan fabricar los pufs como una forma de salir adelante por cuenta propia, además de contribuir al medioambiente, reciclando cubiertas usadas, evitando así que estas se conviertan en criaderos del Aedes aegypti, mosquito transmisor del dengue y del chikungunya.
Mencionó que se enseña a los participantes cómo igualar las ruedas, cómo cortar la cuerina y unirlas con alambre, además de forrar los pufs y pegar los asientos.
“La idea es que aprendan cómo se elaboran los pufs y después del curso ya puedan hacer ellos mismos y que salgan adelante por cuenta propia”, expresó.
Uno de los alumnos, Cristian Alvarenga, comentó que además de fomentar la capacitación, este evento ayudó a unir más a las familias, ya que los muebles se elaboran con ayuda de los padres.